Un aprendizaje muy valioso que todos podemos hacer al relacionarnos con otros es 𝗮𝗽𝗿𝗲𝗻𝗱𝗲𝗿 𝗱𝗲𝗹 𝗳𝗲𝗲𝗱𝗯𝗮𝗰𝗸 que nos brindan.
Esto nos puede ayudar a conocer nuestras áreas ciegas y trabajar para potenciarlas o mejorarlas dependiendo cuál de ellas sea.
Hay una estrategia que leí en un libro de Jack Canfield que me gusta mucho y es útil para pasar por un tamiz las opiniones de los demás:
"𝑆𝑖 𝑢𝑛𝑎 𝑝𝑒𝑟𝑠𝑜𝑛𝑎 𝑡𝑒 𝑑𝑖𝑐𝑒 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑟𝑒𝑠 𝑢𝑛 𝑐𝑎𝑏𝑎𝑙𝑙𝑜, 𝑒𝑠 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑠𝑡á 𝑙𝑜𝑐𝑎. 𝑆𝑖 𝑡𝑟𝑒𝑠 𝑝𝑒𝑟𝑠𝑜𝑛𝑎𝑠 𝑡𝑒 𝑑𝑖𝑐𝑒𝑛 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑟𝑒𝑠 𝑢𝑛 𝑐𝑎𝑏𝑎𝑙𝑙𝑜, 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑒 ℎ𝑎𝑏𝑒𝑟 𝑢𝑛𝑎 𝑐𝑜𝑛𝑠𝑝𝑖𝑟𝑎𝑐𝑖ó𝑛 𝑒𝑛 𝑡𝑢 𝑐𝑜𝑛𝑡𝑟𝑎 ... 𝑆𝑖 𝑑𝑖𝑒𝑧 𝑝𝑒𝑟𝑠𝑜𝑛𝑎𝑠 𝑡𝑒 𝑑𝑖𝑐𝑒𝑛 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑟𝑒𝑠 𝑢𝑛 𝑐𝑎𝑏𝑎𝑙𝑙𝑜, 𝑐ó𝑚𝑝𝑟𝑎𝑡𝑒 𝑢𝑛𝑎 𝑠𝑖𝑙𝑙𝑎 𝑑𝑒 𝑚𝑜𝑛𝑡𝑎𝑟."
Muchas veces es difícil aceptar opiniones de otros que no coinciden con la imagen que tenemos de nosotros mismos o que pretendemos mostrar. Muchas veces son aspectos que rechazamos de nosotros, que no nos gusta o simplemente no sabíamos que ese era el impacto que producía en los demás nuestro comportamiento.
Por ello la estrategia del tamiz me resulta interesante. Pararnos ante un feedback y analizar qué tipo de feedback te están dando, basando en qué aspectos y comportamientos, qué tan valioso resulta para ti y para la relación que tienes con esa persona, sin olvidar que es sólo una opinión de como lo está viendo ese otro.
Y a ti, ¿𝐐𝐮é 𝐟𝐞𝐞𝐝𝐛𝐚𝐜𝐤 𝐭𝐞 𝐡𝐚𝐧 𝐝𝐚𝐝𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐭𝐞 𝐚𝐲𝐮𝐝ó 𝐚 𝐜𝐨𝐧𝐨𝐜𝐞𝐫𝐭𝐞 𝐦á𝐬 𝐩𝐨𝐫𝐪𝐮𝐞 𝐥𝐨 𝐝𝐞𝐬𝐜𝐨𝐧𝐨𝐜í𝐚𝐬? ¿Qué te sorprendió y qué te ayudó a modificar? ¿Cómo te ayuda a cambiar la relación con los demás el hecho de conocer el impacto que tienen tus acciones?
Si no estás acostumbrado a recibir feedback, dentro del apartado de herramientas, hay algunas de ellas que te pueden ayudar a obtenerlo de los que te rodean y ayudarte a reducir las áreas "ciegas", esas de las que no somos conscientes y necesitamos detectar.
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